Ofrenda de las Siete Ramas
Hay muchas sādhanās que incluyen la ofrenda de las siete ramas. La ofrenda de las siete ramas es una forma de acumular mérito, una forma de purificar nuestro karma negativo y nos permite purificar todo tipo de aflicciones dentro de nuestro continuum mental. Para un practicante que está entrenando su mente, esto es extremadamente importante. Por lo tanto, debemos practicar esta continuamente.
Cuando digo que esta es una práctica muy importante, no quiero decir que todos los días debamos recitar las palabras muchas, muchas veces. Eso no es lo que quiero decir. Lo que quiero decir es que debemos reconocer la función, los beneficios de la ofrenda de las siete ramas. Y una vez que estemos muy claros acerca de los beneficios de esta ofrenda de las siete ramas, será muy beneficioso para nuestra práctica.
S.E. Nubpa Rinpoche La ofrenda de las siete ramas purifica todas nuestras oscuridades y nos permite acumular mérito. También aumenta nuestra sabiduría dentro de nuestra mente. De hecho, todos los seres sintientes tienen la naturaleza de Buda, el tathāgatagarbha. Pero los seres sintientes no pueden manifestar las cualidades de un Buda porque no han reconocido la propia naturaleza debido a la confusión. Y debido a la confusión, crean todo tipo de karma y en sus mentes surgen diferentes tipos de aflicciones. Esto oscurece nuestra sabiduría innata. Por lo tanto, para purificar todos estas diferentes oscurecimientos en el pasado, Garchen Rinpoche, dio enseñanzas sobre la ofrenda de las siete ramas en Lapchi, recuerdo estas enseñanza y lo que Rinpoche dijo sobre el propósito de la oración de las siete ramas.
Tú eres Chenrezig, la esencia de la bondad amorosa y la compasión. Eres la propia Tārā, tu amor a los seres es igual al de una madre.
En el pasado, cuando estaba en Lapchi, condiciones realmente preciosas se reunieron. Garchen Rinpoche también vino a Lapchi y en ese momento dio muchas enseñanzas del Dharma, especialmente la enseñanza de Mahāmudrā a todos los yoguis en la montaña. Sus enseñanzas nos fueron muy beneficiosas. En ese momento, Garchen Rinpoche nos explicó el significado de la ofrenda de las siete ramas.
Tārā Blanca En ese momento, pensé en ofrecerle a Rinpoche las siete ramas. Realmente siento que la compasión de Garchen Rinpoche no es diferente de la de Tārā. Él mismo es Tārā. Tārā también es la unión de la compasión de todos los Budas y Bodhisattvas. Y Garchen Rinpoche es la personificación de la bondad y compasión de Tārā. Él no es diferente de Tārā. Y así vemos al Guru como Tārā, quien está físicamente justo frente a nosotros.
Esto es desde mi experiencia personal. Garchen Rinpoche, sin importar qué ser sintiente vea, sin importar quién sea, qué tan alto, qué tan bajo, qué tan vieja o qué tan joven sea, la forma en que Garchen Rinpoche trata a los demás seres sintientes es igual que una madre que trata a su propio hijo. Para mí, un guru como Garchen Rinpoche, que ama tanto a los seres sintientes, es realmente raro. Entonces, en mi mente, cuando pienso en esto, usaría a Tārā como una analogía de Garchen Rinpoche y su amor por los seres sintientes.
En ese momento quize aprender la práctica de Tārā blanca. Cuando estaba haciendo retiro en Lapchi tuve un sueño. Y en mi sueño vi a Garchen Rinpoche y estaba en la cima de una montaña y en la cima de la montaña había una gran estatua de cobre de Vajrayogini. Y también había otra gran estatua de Tārā. Garchen Rinpoche es la manifestación de Tārā y también la manifestación de Vajrayogini. Entonces, como un ser ordinario, a menudo fabricamos cosas. Porque Vajrayogini a veces tiene una forma feroz y Tārā, especialmente Tārā blanca, siempre expresa amor y compasión, por eso uso la forma de Tārā blanca para practicar.
Vajradhara, Soberano que permeas el Océano de Mandalas, ¡Glorioso Garchen, te suplico!
Por lo general, en las prácticas del Vehículo Vajra, recibiríamos el empoderamiento, la transmisión oral y las enseñanzas. Entonces, el Guru que posee estos tres méritos es el mismo Vajradhara y es Soberano de un océano de todos los Mandalas. Yo mismo he recibido muchos empoderamientos de Garchen Rinpoche, así como transmisiones orales y especialmente enseñanzas sobre la naturaleza de la mente, sobre el Mahāmudrā. Para mí, Rinpoche posee estos tres méritos. Así que para mí, él es lo mismo que Vajradhara. No es diferente de Vajradhara, por eso le suplico de esta manera.
Vajradhara Postraciones
En primer lugar, cuando hacemos postraciones [o rendimos homenaje], si en nuestro continuum mental hay orgullo, hay vanidad, las postraciones pueden purificar o ser un antídoto para esto. Para las personas con orgullo, normalmente no hacen postraciones. Este es el punto de la postración. Y en el proceso de postración, juntamos nuestras manos con las palmas juntas y las colocamos en nuestra frente, garganta y pecho, de esa manera se puede purificar los oscurecimientos de nuestro cuerpo, palabra y mente y al mismo tiempo recibir las bendiciones de nuestro Guru. Esto es lo que significa postrarse. Sin embargo, aquí estamos hablando de algo más, en el momento cuando le ofrecí a Garchen Rinpoche la ofrenda de las siete ramas, lo que quería expresar se encuentra en las líneas:
Al Guru, a la presencia y a mi propia mente, Inseparables, rindo homenaje respetuosamente.
Siempre deberiamos estar pensar en nuestro Guru. Como practicantes, al despertanos por la mañana, se llama al Guru a través recitación “Llamando al Guru desde Lejos” Cuando pensamos en nuestro Guru, es posible que solo estemos pensando en su forma física. Sin embargo, ¿qué es esta mente que está pensando en el Guru? Esta mente piensa a través de sus pensamiento. Así que hay diferentes razones para pensar en el Guru. Por nuestra gratitud y fe hacia nuestro Guru pensamos en él. Este pensamiento surge de nuestra mente, el Guru en el que piensas, esto surge dentro de la mente, la forma del Guru surge dentro de nosotros. Cuando examinamos la mente que piensa en el Guru, que en realidad es nuestra propia naturaleza, la naturaleza de nuestra mente, es la unión de la vacuidad y la claridad. Entonces, al principio, podemos comenzar con el pensamiento del Guru o podemos pensar en la vacuidad y la claridad que es la naturaleza de nuestra mente. Estos tres no están separados, están juntos. Así que, además de este pensamiento puro, no hay nada más. Nada más tiene la naturaleza de la vacuidad y la claridad. Y aparte de la vacuidad y la claridad, no hay Guru. Entonces, cuando los tres están juntos, en unión, no tenemos que tener una mente fabricada. Pensamos en los tres como uno solo. Y en mi opinión, esta es la forma más pura de ofrecer una postración a nuestro Guru. Y es sobre la base de esta comprensión de la mente yo escribí estas líneas.
En mi experiencia y práctica, también hay algo que se originó a partir de esto. Mi primera vez cuando fui a Taiwán, desde India, vi a Su Santidad. Como seres ordinarios, tenemos el hábito de querer pedir o solicitar ayuda. Sabemos que nuestra capacidad propia es limitada, y por eso le pedimos o solicitamos a nuestro Guru, a los Budas y Bodhisattvas que nos ayuden. Así que en el momento en que me encontré con Su Santidad, le pedí que me diera algunas bendiciones, luego de hacer tres postraciones. Su Santidad es realmente compasivo, así que buscó un texto. El contenido de este texto es extremadamente profundo, pero aún así no está expresado en un lenguaje realmente profundo. El contenido es profundo, pero no el lenguaje. Cuando Jigten Sumgön estaba a punto de pasar al Parinirvana, en el año del Buey de Fuego, todos los discípulos le solicitaron que continuara quedándose por mucho tiempo. Entonces, Jigten Sumgön dijo que no hay nada más que pueda dejarles, excepto esto, porque todo lo demás proviene de sus mentes. Mi dharmakaya es no nacido y no cesará. Siempre estará ahí.
Estas cuatro líneas me han inspirado enormemente. Lo que dicen estas cuatro líneas es que en cada momento debes mantener el estado de la Mahāmudrā. Basado en tu naturaleza, Mahāmudrā, tu naturaleza y Mahāmudrā no son diferentes. Son uno. Lo que esto significa es que nuestro Guru y nuestra mente son lo mismo. Esto es lo que Jigten Sumgön había dicho. Si realmente creemos que nuestra naturaleza es el Buda, sé que podemos confiar en esta línea. Esto es a partir de mi entendimiento, experiencia y práctica.
En el pasado, cuando estudiaba las Canciones de la Realización de Jetsun Milarepa, hubo muchas veces en las que en mi mente surgía fe a partir del estudio de sus Canciones de la Realización. Cuando Milarepa estaba a punto de pasar al Parinirvana, sus discípulos también le preguntaron: “Entonces, ¿a dónde irás y a dónde deberíamos ir nosotros? ¿Cómo podemos suplicarte en ese momento?” En su biografía, Milarepa dijo que en cualquier momento en que pienses en él, él estará justo delante de ti.
De la misma manera, cuando tenemos fe en nuestro Guru, en el momento en que pensamos en el Guru, pensamos en su mente. Él está más allá del tiempo y el espacio. En cada momento, nuestro Guru está dentro de nuestra mente. Entonces, cuando el Guru y nuestra mente están juntos en unión con todo lo demás, ¿cómo habría espacio o lugar para la arrogancia en nuestra mente? No es posible. Porque la arrogancia surge del dualismo, cuando hay una separación entre el yo y el otro. Una vez que tienes ese tipo de mente que discrimina el yo y los demás, entonces surgen los pensamientos de “Oh, soy mejor que el otro” Sin ese tipo de pensamiento, entonces la arrogancia no surgiría. La arrogancia sería eliminado por completo.
Ofrendas
Segundo son las ofrendas. Todo lo proveniente de las ofrendas puede ser un antídoto para nuestra avaricia. La mayoría de las veces deseamos o nos aferramos a todo tipo de cosas materiales. Por ejemplo, podemos aferrarnos a nuestro cuerpo, a nuestra profesión e incluso a nuestras cualidades. Existe ese tipo de apego. Cuando tenemos la mente que idea “Oh, esta es mi profesión, mis cualidades”, entonces tenemos apego. Con la ofrenda del mandala podemos ayudar a eliminar todo tipo de idealización o apego hacia estos objetos. Así que escribí:
Las apariencias y existencia, son ofrecidas como ornamentos De los seis sentidos, establecidos en su estado natural no fabricados.
Estamos haciendo ofrendas, ¿verdad? Y cuando hacemos ofrendas, debemos ofrecer cosas buenas. No ofrecemos cosas que no sean tan buenas, ¿verdad? Es inútil ofrecer cosas que no son buenas. Por lo tanto, debemos ofrecer cosas buenas. En nuestra mente, cuando tenemos la idea o el concepto de lo que es bueno, entonces lo que es malo también estará presente. Todo tipo de fenómenos pueden ser ofrecidos. Hay cosas buenas y hay cosas malas. Pero desde el punto de vista de la naturaleza de nuestra mente, tenemos los seis tipos de conciencia: nuestros ojos, oídos, nariz, lengua y mente. Luego, los seis tipos de conciencia, tenemos el sonido, la forma, los sonidos, el gusto y demás. Cuando todas estas cosas aparecen frente a nosotros, fabricamos la idea de que algo es bueno o malo. En las enseñanzas de Mahāmudrā, habla de cómo las cosas se aparecen, pero estas están libre de cualquier fabricación. Por lo tanto, no fabriquemos ideas o analicemos. Cuando miramos una flor, por ejemplo, no decimos: “Esta es una flor buena, esta no es una flor buena, esta es una flor bonita, esa no es una flor bonita” No hay discriminación entre lo bueno y lo malo. De esta forma, la mente descansa en la ecuanimidad. No hay bueno ni malo, todo es bueno. Por lo tanto, si somos capaces de hacer ofrendas basadas en tal estado, es la forma correcta de hacerlas.
¿Qué estamos ofreciendo? Estamos ofreciendo al guru en nuestra mente, que es vacuidad y claridad. Y descansamos en eso, el guru en nuestra mente, que es vacuidad y claridad. Así es como entendemos esta línea desde esta perspectiva. También decimos que ofrecemos la cantidad de ofrendas de Samantabhadra. Y de manera similar, también hacemos ofrendas de manera no fabricada, de manera natural y espontanea.
Reconocer las faltas abiertamente
Tercero es la confesión. La confesión es un antídoto para la ira. Por ejemplo, para las personas que tienen mucha ira, no se confesarían. Si dos personas están discutiendo y esta persona tiene mucha ira, en ese momento no sería capaz de disculparse con la otra parte. De manera similar, una persona con mucha ira no sería capaz de confesarla. Cuando te confiesas, significa que tu ira ha sido dominada. El objetivo de la confesión es confesar todas nuestras acciones negativas. Por eso he escrito:
Las nubes de las aflicciones y pensamientos discursivos son confesados, Al ser auto-liberadas en la esfera del espacio. Libre de la prisión de la fijación dualista,
La fuente de todo nuestro karma negativo proviene de nuestras aflicciones mentales. En el momento en que surgen las aflicciones, por ejemplo, la ira, en ese momento nos aferramos a ella. Pero cuando observamos la ira a través de la presencia clara, la ira pierde su poder. Naturalmente desaparecerá. ¿Dónde desaparece? Desaparece en nuestra mente, en la vacuidad de nuestra mente. Esta es una forma de confesión. Es realmente beneficioso para nosotros usar la atención plena para observar nuestra mente y confesarnos.
Alguien me preguntó: “a veces cuando visualizo a los Budas y Bodhisattvas, me resulta muy agotador y a veces no puedo visualizar con claridad y me siento bastante frustrado al respecto” Cada practicante atraviesa por esta dificultad. En el pasado, cuando estaba haciendo la práctica de Vajrasattva y las prácticas preliminares, también me encontré con esta dificultad. En esta la sādhanā nos dice que tenemos que visualizar algunas cosas. Cuando estoy visualizando, a veces no puedo visualizar con claridad. Y a veces, cuando puedo visualizar claramente, no puedo mantener esta visualización clara durante mucho tiempo. Es solo por un breve momento. Y luego debo de esforzarme en visualizar de nuevo. Es agotador y difícil. Pueden surgir muchos pensamientos discursivos diferentes debido a esto. Es como diferentes olas que aparecen en el agua. En muchos momentos me enoje consigo mismo. “Se supone que debo ser un practicante” ¿Cómo puede un practicante tener tantos pensamientos?” Así que hubo momentos en los que me enojé conmigo mismo y me golpeaba a mí mismo, me odiaba a mí mismo.
En una ocasión, Garchen Rinpoche llegó a en Jangchung Ling, en India. Rinpoche nos instruyó en una práctica en particular y yo tuve la oportunidad de ser parte de esta. En ese momento, le pregunté a Garchen Rinpoche: “Rinpoche, tengo muchos pensamientos que surgen y realmente me esta creando dificultades, y hay momentos en los que me golpeaba a mí mismo” Garchen Rinpoche se rió y dijo: Estás siendo demasiado serio, estas aflicciones, todo tipo de pensamientos discursivos, son las funciones de la mente. Son como burbujas en el agua. Cuanto más les prestas atención, más surgirán. Así que simplemente obsérvalos con la una presencia clara. No te enfades con ellos. No trates de luchar contra ellos. No los sigas. No odies esos pensamientos. Los pensamientos desaparecerán naturalmente dentro de la vacuidad y la claridad porque de hecho son manifestaciones de nuestra mente. Nuestra mente tiene movimiento y estabilidad. La estabilidad es vacuidad y claridad. El movimiento también es vacuidad y claridad. Una vez que has comprendido esto, entonces no necesitas que tranquilizar tu mente especialmente. Y no tienes que sentir animosidad hacia esos pensamientos y aflicciones. Así que cuando surjan todo tipo de pensamientos, utiliza este método, esa fue la enseñanza que Rinpoche nos dio. Y fue realmente beneficioso para mi continuum mental. Y desde ese momento, mi entrenamiento mental se volvió extremadamente placentero, gozoso. Si puedo tranquilizar mi mente, la dejo en calma. Y si surgen muchos pensamientos en mi mente, se convierten en uno de los objetos que puedo observar, que puedo visualizar. Así que continuamente uso esto como recordatorio para mi presencia clara. Y naturalmente, me ayuda a desarrollar mi presencia clara.
Así que para nosotros, cualquier pensamiento que surja, son solo pensamientos.Y habrá momentos en los que los pensamientos sean virtuosos, pensamientos beneficiosos, como la compasión hacia los seres o fe hacia nuestro Guru. Tendremos estos pensamientos positivos. Pero también habrá momentos en los que haya aflicciones, pero ambos son pensamientos.
También le pregunte a Rinpoche: Debemos desarrollar los pensamientos positivos. ¿Pero debemos deshacernos de los pensamientos negativos? En respuesta Rinpoche me dio una analogía. Rinpoche dijo: la leche, por ejemplo, se puede beber, ¿verdad? Y yo respondí, por supuesto, la leche se puede beber. Y luego Rinpoche preguntó, ¿y qué hay de la tinta que usamos para escribir? ¿Podemos beber tinta? Entonces yo respondí, no, la tinta no se puede beber. Entonces Rinpoche dijo, ambos son líquidos. Sin embargo, puedes beber leche, pero no puedes beber tinta. Entonces, ¿cuál es la diferencia? Aunque en la superficie, puede parecer un pensamiento discursivo, pero por una razón, uno es beneficioso para nuestro entrenamiento, pero el otro, no es beneficioso, sino que resultaría ser un obstáculo para nuestro entrenamiento.
Jigten Sumgön, en La Única Intención, había dicho que las negatividades de la mente y las acciones negativas no oscurecen el Mahāmudrā. Así que encuentro que coincide perfectamente con lo que se dice aquí y con lo que Rinpoche me enseñó. Este es el método que uso cuando surgen las aflicciones.
Regocijarse
El cuarto es regocijarse. Nos regocijamos en todo el mérito, ya sea propio o de los demás. Así que debemos regocijarnos y alegrarnos en todo tipo de mérito. Incluso si no participamos en esas acciones virtuosas, cuando nos regocijamos en ellas, es lo mismo que haber participado en ellas. Por lo tanto, esto es muy beneficioso para nosotros cuando queremos acumular mérito. El regocijo es un antídoto contra los celos. Nos regocijamos para purificar los celos en nuestro continuum mental. En la sādhanā dice:
“Libre de la prisión de la fijación dualista, me regocijo desde el estado de ecuanimidad”
La razón por la que tenemos celos de otras personas es debido al dualismo que discrimina entre dos, como el yo y el otro. Así que cuando tenemos este pensamiento que separa el yo y el otro, este profundiza cada vez más, y hace que nuestra mente quede atrapada en este tipo de fabricación y no somos capaces de alcanzar la ecuanimidad. Pero si somos capaces de descansar en la ecuanimidad, no es posible que sintamos celos en absoluto. Así que nos regocijamos en todas las acciones virtuosas de los demás, como su generosidad a través de ofrendas y demás.
Solicitar las enseñanzas
Quinto es solicitar las enseñanzas. Esto es principalmente un antídoto para nuestra confusión. ¿Cómo entrenamos nuestra mente? No lo sabríamos sin las enseñanzas. Por lo tanto, para poder purificar nuestra confusión, tenemos que solicitar a los gurus que giren la rueda del Dharma y gradualmente purificar todos los diferentes tipos de confusión dentro de nuestros continuum mentales. Así que en la sādhanā dice:
Por el bien de los seres envueltos en la oscuridad de la confusión Enciende la antorcha de la Consciencia Primordial.
Entonces, ¿por qué solicitamos que se gire la rueda del Dharma? Es porque los seres sintientes estan sumidos en la confusión. ¿Cómo purificamos esta confusión? Frente a los budas, Bodhisattvas y gurus, solicitamos que giren la rueda del Dharma. Dependemos de su sabiduría para librarnos de nuestra confusión.
En el proceso de aprender el Dharma, tenemos que escuchar, contemplar y practicar. Primero tenemos que escuchar las enseñanzas del Dharma. Luego debemos contemplar el significado de la enseñanza del Dharma. Y por último las practicamos en nuestra vida diaria. Así que la claridad que proviene de escuchar, contemplar y practicar, se origina principalmente de la base de escuchar las enseñanzas del Dharma. Es por eso que solicitamos a los gurus que giren la rueda del Dharma y de esta manera, a lo largo de todas nuestras vidas, podremos encontrarnos con las enseñanzas del Dharma y desarrollar la claridad y sabiduría que está dentro de nosotros.
Pedir que no pasen al nirvana
Sexto es pedir a los gurus que permanezcan durante mucho tiempo.
Que yo y los demás seres tengamos el mérito y la buena fortuna
De que tu vida sea larga y firme.
Esto es un antídoto para todo tipo de puntos de vista erróneos, por ejemplo, faltarle el respeto al guru. Esto purifica o es un antídoto para esto. ¿Por qué necesitamos solicitar a los gurus que permanezcan durante mucho tiempo? Es porque los gurus están aquí por el bien de los seres sintientes. El Dharmakaya del guru es no nacido y no puede cesar. Por lo tanto, no es posible que el guru no esté presente porque el guru es como el espacio. Sin embargo, la manifestación de nuestro guru, su forma, aparece de acuerdo con las diferentes necesidades o capacidades de los seres sintientes. Y ellos se manifiestan y aparecen para que podamos desarrollar nuestra sabiduría y claridad. Y por eso solicitamos a los gurus que permanezcan durante mucho tiempo.
Dedicación de mérito
Último es la dedicación de mérito. La dedicación es un antídoto para nuestro apego, nuestro egoísmo, especialmente para el egoísmo que está en nuestro continuum mental.
Que la virtud acumulada a través de esta meditación y demás, Se convierta en beneficio para todas las madres que llenan el espacio.
Superficialmente, algunas personas pueden estar realizando todo tipo de acciones virtuosas. Pero si en nuestra mente no contemplamos profundamente, definitivamente hay cierta medida de egoísmo. Por ejemplo, he hecho esta acción virtuosa para que en el futuro pueda recibir los resultados de sus frutos. Para volverse rico o volverse poderoso. O tal vez para disfrutar de todas las cosas buenas en esta vida. Es posible que pensemos así. En el proceso de entrenamiento de la mente, en primer lugar, necesitamos examinar nuestra motivación.
Alcanzar la Budeidad, por supuesto, es el resultado más grande y precioso de nuestro entrenamiento. Cuando alcanzamos ese resultado, ¿cuál es el objetivo? ¿Por qué queremos alcanzar eso? No es para que yo pueda recibir este resultado. Alcanzar un gran gozo y disfrutar de este gran gozo. Ese no es el objetivo. Entonces, cuando entrenamos nuestra mente, en primer lugar, debemos pensar que quiero alcanzar la Budeidad porque quiero liberar a todos los seres sintientes. Pero ahora soy solo un ser ordinario. No tengo la capacidad. Por lo tanto, para beneficiar a nuestras madres seres sintientes, necesitamos alcanzar la Budeidad. Solo entonces sería capaz de liberar a los seres sintientes.
La motivación de nuestro entrenamiento de la mente es realmente la bodhicitta, la mente altruista. Cuando practicamos, no debemos pensar que, “Oh, parte del mérito, quiero guardarlo solo para mí” Y luego esta otra parte, “dedicaré a todos los seres sintientes” No pienses de esta manera. Todo lo que hacemos, todas las cosas virtuosas que hacemos, las dedicamos a todos los seres sintientes. Esto ayuda a purificar nuestro aferramiento al yo. Y somos capaces de acumular el mérito para beneficiar a los seres sintientes.
En el sendero del Quintuple Mahāmudrā, Jigten Sumgön también ha mencionado con frecuencia que sin dedicar el mérito correctamente, nuestras acciones virtuosas podrían no conducir a nuestra Budeidad. Jigten Sumgön ha dicho que hemos pasado por muchas vidas diferentes dentro del ciclo de la existencia y hemos realizado muchas acciones virtuosas, sin embargo, ¿por qué aún no hemos alcanzado la Budeidad? Es porque no hemos dedicado el mérito correctamente. Por eso no hemos alcanzado la Budeidad. Por lo tanto, la dedicación es muy importante.
Esta oración de los Siete Ramas fue ofrecida por Drikung Nubpa Rinpoche durante el retiro de Garchen Rinpoche en la sagrada cordillera nevada de Drog Lapchi.
S.E. Nubpa Rinpoche Esta es la oración de las siete ramas. La ofrecí a Garchen Rinpoche cuando estuve en Lapchi. Aunque no utilicé un lenguaje realmente hermoso, fue realmente desde mis sentimientos más sinceros e hice esta ofrenda al Guru. El Guru también es realmente compasivo. El Guru me permitió tener esta oportunidad de acumular mérito y por eso puso estas líneas dentro de esta sādhanā. Estoy profundamente agradecido por la compasión del Guru.